La erección es una respuesta fisiológica en la que participan mecanismos vasculares, neurológicos y endocrinos.
Se inicia mediante estímulos sensoriales que se generan en órganos genitales y/o estímulos psicógenos, visuales, auditivos, etc., que se trasladan hacia el cerebro.
La vasodilatación de las arterias cavernosas y helicinas del pene provocan un aumento del flujo sanguíneo hacia los espacios lacunares. La expansión contra la túnica albugínea provoca la compresión de los canales de drenaje venoso.
Blanca Isabel Soria Arranz
Sexóloga