La homosexualidad es la atracción sexual y los sentimientos afectivos hacia personas del mismo sexo. La bisexualidad, hacia personas de ambos sexos. Es frecuente que en distintos momentos de nuestras vidas nos puedan surgir dudas respecto a nuestra orientación sexual.
Durante la adolescencia, sobre todo cuando nuestro cuerpo va cambiando para formarnos como adultos, solemos tener sensaciones confusas que a veces nos resulta difícil comprender, pero también pueden surgir dudas a lo largo de distintos períodos en nuestra edad adulta.
El deseo sexual hacia personas de ambas orientaciones es frecuente, pero el hecho de que en la mayoría de las culturas solo se consideren las relaciones heterosexuales como «sanas» y «normales», puede llevarnos a poner freno a nuestras preferencias naturales.
Hasta hace poco se condenaba la homosexualidad considerándola una enfermedad o una elección perversa. Pero no es cierto: homosexual se nace, no se hace, si bien, podemos cambiar de orientación a lo largo de nuestra vida.
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Aceptándote
Lo importante es que aceptes con naturalidad tus sentimientos sin etiquetarte, sin dejarte presionar. Si posteriormente necesitas definirte, lo podrás ir haciendo poco a poco.
Es normal necesitar saber si eres homosexual, bi o heterosexual, porque saber cuál es tu identidad sexual a edad temprana puede ayudarte a desarrollarla más plenamente, sin complejos y en libertad, con la autoestima alta y sintiéndote fuerte.
En culturas o personas donde hay una buena aceptación de cualquiera de las orientaciones sexuales, es cada vez menos necesario definirse dentro de uno u otro grupo. Simplemente se dejan fluir las tendencias libremente y con naturalidad.
¿Cómo saber si soy homosexual? El generador de conflicto con más frecuencia
Lo primero que puede ayudarte es que reconozcas con quien fantaseas más y te provoca mayor excitación cuando tienes sexo contigo mismo, cuando te masturbas. Nuestras fantasías íntimas nos sirven para el autoconocimiento, sobre todo en el momento álgido, previo al clímax, solemos tener fantasías recurrentes que nos proporcionan más información sobre cuál es nuestra mayor tendencia en cuanto a orientación sexual.
También puedes preguntarte por qué personas te sientes atraído cuando vas a un lugar público, ¿quiénes atrapan más tu interés?, ¿qué fotos o qué escenas conquistan tu mirada en internet? Y cuando te bebes una copa, ¿quiénes te resultan más seductores?
Otra pregunta a la que debes responderte sinceramente a ti mismo es: ¿por quién sientes ilusión y afecto romántico? ¿de quién te enamoras? Esto es así porque a veces puede uno sentirse atraído sexualmente por personas del mismo sexo, pero es necesario sentirse al menos algo enamorado alguna vez para reconocerse como homosexual o bisexual.
Si en este momento sientes atracción por alguna persona del mismo sexo, no debes reprimirte, todo lo contrario, debes dejar fluir tus sentimientos y aceptarlos con naturalidad. Con el tiempo sabrás si es algo esporádico o si te da datos sobre tu orientación sexual.
Al analizar con sinceridad tus sentimientos y tu conducta sabrás si eres o no gay. No basta con que sientas atracción sexual por el mismo sexo, es necesario también tener una atracción sentimental. Eso es lo más determinante.
Asimismo, hay estereotipos sobre las lesbianas y los gays que corresponden a clichés no reales y ya en desuso, afortunadamente. Las lesbianas no tienen porqué tener conductas masculinas ni los gays ser afeminados. No tienes porqué identificarte con estos falsos modelos para ser homosexual, no permitas que esto te confunda.
No existe una fórmula mágica para saber si lo eres o no. Lo importante es que seas sincero contigo mismo con respecto a tus sentimientos y estés abierto a descubrirlo a través de tus experiencias y sensaciones.
Busca ayuda
Si has sido sincero en el diálogo contigo mismo y has llegado a la conclusión de que eres homosexual, (lesbiana o gay), o bisexual, te resultará difícil manifestarlo a tus amigos y familiares. Lo mejor es que busques ayuda en otras personas de tu misma orientación sexual, que ya lo hayan hecho, y en profesionales cualificados que te indicarán cómo puede resultarte más fácil y cómo encajar la posible oposición. Cuando estés preparado/a, manifiéstalo con naturalidad y eso facilitará a los demás el aceptarlo del mismo modo. Cuenta con PiscOÓptima para lo que necesites.
Blanca Isabel Soria Arranz
Sexóloga
Imagen: Pixabay